lunes, 25 de marzo de 2013

Desnudos emocionales

Quedarse en pelotas con el corazón abierto es una de las situaciones más difíciles en las que el ser humano se encuentra, son aquellos momentos en que "nos han pillado".

Hay gente con capacidad para hacer un desnudo al más puro estilo holliwood, se va quitando capas...poco a poco...dejando ver cual es el asunto principal, ese cuerpo semidesnudo que anuncia un final espectacular, seguro y muy esperado por el espectador..
Otros tenemos la gracia de encontrarnos desnudos y con el corazón palpitando  sin apenas darnos cuenta, porque resulta que ha habido un gesto, una canción o una sola palabra que ha quitado de golpe toda la ropa y disfraces del bien quedar. Son esos instantes veloces que uno no sabe como ha acabado rozando la mano del otro o bien hablando de su caja de secretos de niño....sorprendernos de que "somos lo que somos".

Esta mañana Unalumno me decía que no quería ir de viaje de fin de curso..solo imaginarse las duchas y tener que mostrar su cuerpo le suponía la decisión de no ir, de "desapuntarse". Ante mi tenía a un chico brillante, con la conversación ágil, con una sonrisa de las buenas y unas manos dispuestas a ayudar a otros...sin embargo él se veía con un sólo par de parámetros: peso y altura.
 Ver nuestro alrededor con unos parámetros ajustados hace que distorsionemos lo que vemos, es como si la tele solo la pudiéramos ver con la imagen:  tamaño de la pantalla y el color...pero donde está ¿el sonido? ¿los contrastes?...los brillos!!! OHHH!!! LOS BRILLOS!!!!.
 El observar el mundo con muchos indicadores hace que sea un mundo con muchas posibilidades. Tener a mi alrededor un mundo en el que sólo diferencio la talla y el peso...se me queda tan corto, tan pequeño que me agobiaría....
    Unalumno y yo hemos estado hablando de las cosas que nos ilusionan sin que tenga que ver con peso y altura, luego hemos divagado en como un miedo puedo ser tan grande que cabe siendo él el dueño de nuestras decisiones, de nuestras salidas...y que encima se crea con el derecho de decidir que "no se va al viaje de fin de curso".
     De fondo había un mensaje más....."Aunque te parezca que es una tontería para mi es importante"...y aquí es cuando al poner en primera plana a Unalumno...el miedo se ha ido haciendo pequeño.
     Unalummo no es muy diferente de cualquier Adultito que mide su alrededor por el dinero que cobra, el coche que tiene o los años de una persona.
 ¿Como podemos abrir mentes? ¿Cómo pidemos explicar que el ser humano tiene más características que vocabulario para definirlo?......Y he llegado a una humilde conclusión:
Los esquimales distinguen 1000 blancos...nosotros no llegamos a 10. Dependiendo de nuestra necesidad y nuestro aprendizaje distinguiré más colores.


Un abrazo blanco marfil aguantando la respiración...1,2.3.....
B.

Y la canción....




3 comentarios:

  1. Unalumno, como la mayoría de nosotros, tiene muchas inteligencias que desarrollar.

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  2. La magia de los colores, la fantasía, la ilusión, la maravillosa simplicidad de lo que nos rodea...,nos permite elaborar mundo más completos, más inspiradores, nos permite observar esa parte de mundo que muchas veces nos perdemos...

    Cuando nos hacemos mayores pensamos que iremos eliminando de nuestra mochila esas inseguridades y lastres, sin embargo, siguen ahí, como le pasa a Unalumno, sólo que en este caso él ha tenido la valentía de ser sincero,de decirlo en voz alta, hacerlo más real y poder enfrentarse, porque al crecer entra en juego una nueva variable: no mostrar/sentir vulnerabilidad.

    ¿Acaso no estaremos confundidos?, ¿Por qué no recuperamos aquello que perdimos por imposiciones y etiquetas sociales?

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  3. Me encanta leerte, Lady. Siempre me haces pensar y sonreír. Eso sí, el temazo que has elegido para el final... Unalumno tiene suerte de tener Unaeducadora que le haga hablar de "cosas que nos ilusionan", porque la vida es COMPARTIRSE, no un "háblame de ti", "te hablo de mí". Es un HABLAMOS. Me encantas conjugando verbos... 80 veces... y más!!!
    Besos de Lady Jones (que tenía mono de Barbarella).

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Me encantará leerte, saber en qué estás pensando...